domingo, 27 de marzo de 2011

La guerra, el gran enemigo

Todos sabemos que las guerras son orquestadas por políticos y dirigentes cuyas motivaciones no van más allá del dinero o el control de recursos estratégicos. Pero que motivaciones puede tener un hombre para masacrar sistemáticamente a sus semejantes sin piedad? Son estas personas malvadas? Son…el enemigo?

En todas las épocas ha habido guerras, y en todas ellas se han cometido atrocidades. Visto así, podríamos pensar que cíclicamente se congregan en el mismo lugar personas malvadas y que, llegado el momento, desencadenan una nueva guerra. O siendo objetivos, podemos deducir con facilidad que hay algo dentro de cada uno de nosotros, que en las condiciones adecuadas puede convertirnos en despiadados asesinos.

El verdadero enemigo, el causante de todo y lo que de verdad debemos temer, no es otra cosa que una emoción: el odio. Es la incorrecta gestión emocional la que convierte a ciertos colectivos en objetivos vulnerables ante convenientes manipulaciones, capaces de engendrar odio y destinadas a canalizar la ira contra un eventual enemigo.

Un ejemplo de ello se ha podido ver recientemente en el conflicto actual, en Libia, donde el actual gobernante Muamar el Gadafi manipula a la población mediante la difusión de la creencia que el ejército aliado está masacrando a la población civil libia. Esto, lógicamente es motivo suficiente para que cualquiera de nosotros se abasteciera de armas y arremetiera contra el enemigo con los ojos inyectados en sangre. Si fuera cierto…

Pero no hace falta mirar muy lejos para comprobar que la vida que nos rodea tampoco está exenta de disputas por todo tipo de cuestiones. A todos nos han educado de forma distinta, y por ende, nos molestan cosas diferentes. Esto provoca disputas en situaciones muy dispares. La cola del metro, el vendedor de enciclopedias, un malentendido en una discoteca, un codazo fortuito en un bar, el fin de una relación amorosa, una infidelidad… Todas éstas y muchas otras situaciones pueden convertirse en discusiones, que en algunos casos derivan en reyertas y en ciertos casos desembocan en lo que todos vemos, por desgracia habitualmente, en televisión.

Mi conclusión es que si en una sociedad como la nuestra existen controversias, por nimiedades en la mayoría de los casos, que no seríamos capaces de hacer, cuando lo que está en juego es el pan que hay en tu mesa, o la vida de tu propia familia y vecinos. En definitiva, que no hay gente buena o gente mala, todos somos capaces de odiar, y ese es precisamente el enemigo común que hay que derrotar.

martes, 15 de marzo de 2011

Cual es el futuro de nuestra democracia?


Con frecuencia esta pregunta acude a mi mente cuando me paro a pensar en el panorama político actual...

Según Wikipedia "Democracia es una forma de organización de grupos de personas, cuya característica predominante es que la titularidad del poder reside en la totalidad de sus miembros, haciendo que la toma de decisiones responda a la voluntad colectiva de los miembros del grupo". Pero la realidad es que el colectivo español poco puede decidir sobre el futuro de nuestro país. Es más, creo que nuestro hipotético derecho de decidir quien nos gobierna no es otra cosa que una ilusión...


Puedo afirmar sin temor a equivocarme que en las próximas elecciones generales el partido gobernante será o bien el PP o bien el PSOE. Esto es un hecho. Pero quizá deberíamos reflexionar ante este hecho... Porque luego preguntas por ahí y te encuentras que hay un número alarmante de personas que no confían ni en unos ni en otros. Que ocurre entonces? Acaso no existen otros partidos políticos capaces de ofrecernos otras alternativas? Quizá el colectivo español piensa que son partidos pequeños, con menores recursos e incapaces de estar a la altura...


Personalmente opino que la incompetencia ha predominado en la toma de decisiones del gobierno actual. Y que, por otra parte, la oposición no ha hecho otra cosa que sentarse a contemplar como un gobierno incompetente ha dejado que la economía de nuestro país se marchitase. Sin dignarse a plantear ni un simple atisbo de solución. Simplemente cruzándose de brazos y esperando a que el poder cambie de nuevo de manos...


A mi entender ésto es cualquier cosa menos una democracia. Ojalá la gente despierte y vote a otros partidos políticos en las próximas elecciones generales, para así poder quitar la supremacía de estos dos partidos. Haciéndolo les demostraríamos que para gobernar no basta con sentarse a esperar que el otro "la cague". De este modo entenderían por fin que para gobernar es necesario disponer de lo esencial en cualquier profesión, que no es otra cosa que ser un buen profesional.

Me presento

La verdad es que hace tiempo que sé de la existencia de los blogs como herramienta para plasmar vivencias personales o ideas de temática diversa, pero nunca había pensado en escribir yo el mío propio. En mi caso, más que tener intención de transmitir algún conocimiento en particular, el motivo que me ha llevado a recorrer esta senda no es otro que la intención de probar cosas nuevas. De algún modo, siento el impulso de usar una de tantas herramientas sociales para dejar constancia de mi existencia en la red de redes. Quizá en el momento de escribir estas lineas no tenga bien claro con que tipo de contenido voy a llenar los recovecos de este blog, pero estoy seguro de que algunas de mis opiniones, reflexiones o recuerdos pueden llegar a ser de interés para más de uno. Espero deleitaros, si me lo permitís, con una forma diferente de ver la vida: La mía.